lunes, 19 de enero de 2015

Creación 3. Las funciones del lenguaje

El teléfono empezó a sonar. ¡Qué susto me lleve! Eran alrededor de la seis de la mañana. Descolgué el teléfono y esto fue lo que escuché:
- ¡Buenos días! ¿Me oye bien?
- Sí, sí, dígame -contesté.
-Voy a proponerte una oferta que no podrás rechazar. Cámbiate a Movistar y por solo 10 euros al mes tendrá 1GB de internet.
Me enfadé un montón.
- ¿A usted le parecen horas de llamar a nadie?
Colgué.
Antes de volver a la cama, bebí un poco de agua, fría y cristalina, que me sentó muy bien. Pasó un buen rato, y como no me podía dormir, decidí repasar para el examen de Lengua que tenía al día siguiente; y así, entre "un sintagma preposicional no tiene núcleo" y "el núcleo del sujeto es un sustantivo", me quedé dormida. Al día siguiente llegué tarde a clase.